1. El bautismo y la Cena del Señor son ordenanzas de institución positiva y soberana, establecidas por el Señor Jesús, el único Legislador, para continuar en su Iglesia hasta el fin del mundo.
a Mateo 28:19–20 ; 1 Corintios 11:26
2. Estos santos nombramientos deben ser administrados únicamente por aquellos que están calificados y llamados para ello conforme a la comisión de Cristo.
a Mateo 28:19 ; 1 Corintios 4:1